Fue hace casi cien años cuando un grupo de chicas jóvenes se presentó al encuentro de los Boy Scouts en el Palacio de Cristal vistiendo los uniformes de sus hermanos scouts y exigiendo participar en las actividades.
El 4 de septiembre de 1909, estas chicas jóvenes instaron a Robert Baden-Powell a que abriera un espacio para las niñas. Un año más tarde se fundó el Movimiento Guía.
Una de las pioneras recuerda como ellas marcharon hasta la entrada del encuentro donde se les dijo firmemente que no podían unirse al grupo. En lugar de ponerse a discutir con el encargado, esperaron a que llegara la siguiente tropa scout y entraron sigilosamente sin que nadie se diera cuenta.
Las chicas se unieron a los 11.000 chicos en el estadio pero rápidamente el mismo Robert Baden-Powell notó su presencia. Cuando se les preguntó qué querían, ellas respondieron que querían lo mismo que los muchachos. Baden-Powell les prometió pensar en ello. Finalmente, él resolvió adaptar el programa Scout para las niñas. Decidió llamarlas Guías haciendo homenaje a los famosos Cuerpos Guías en India conocidos ampliamente por su recursividad y coraje.
En 1910 Baden-Powell le pidió a su hermana mayor Agnes hacerse cargo del proyecto; y ese mismo año el Guidismo se fundó formalmente estableciendo la Asociación Guía en el Reino Unido.
En 1918 Olave, la esposa de Baden-Powell, fue nombrada Directora de las Guías del Reino Unido y más tarde, en 1930, llegó a ser la primera y única Jefe Guía Mundial.
Cien años desde entonces, millones de niñas y jóvenes continúan disfrutando del Guidismo/ Escultismo Femenino, participando en programas a través de los cuales desarrollan liderazgo y competencias fundamentales por medio del autodesarrollo, el reto y la aventura.
Fuente: http://www.wagggsworld.org/es/grab/1141/1/SpanishPRESSRELEASEcentenary2010-2012thebirthofGuidingv3.pdf
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